Coeficiente de fricción, rugosidad superficial y resbaladiza de películas plásticas
La relación entre el coeficiente de fricción de la superficie, la rugosidad y la resbaladiza de las películas plásticas está interrelacionada y es crucial para diversas aplicaciones.
La evaluación de la resbaladiza a menudo se basa en la magnitud del coeficiente de fricción. Tanto los coeficientes de fricción dinámicos como los estáticos juegan un papel importante en la evaluación del resbaladizo. Cuando mejora la resbaladiza, hay un cambio correspondiente en los coeficientes de fricción tanto dinámicos como estáticos. Para alinearse mejor con los requisitos del usuario final, es recomendable simular variaciones en el coeficiente de fricción bajo diferentes condiciones de temperatura y humedad.
Coeficiente de fricción superficial de películas plásticas
El coeficiente de fricción de las películas es un parámetro técnico crítico en la producción. Sirve como criterio de evaluación cuantitativa para el rendimiento de apertura de películas plásticas, además de las propiedades antiadhesivas. Además, proporciona datos de referencia para la velocidad de operación de máquinas empacadoras automáticas, ajuste de tensión y desgaste durante la operación de la película. En procesos como impresión, laminación, fabricación de bolsas y embalaje, el coeficiente de fricción superficial de la película está relacionado linealmente con la rugosidad de su superficie. Bajo ciertas condiciones, a medida que aumenta la rugosidad de la superficie, el coeficiente de fricción disminuye. Reducir el coeficiente de fricción es ventajoso para la impresión, la laminación y el recubrimiento de aluminio, ya que mejora la unión entre la película y estos materiales. La magnitud del coeficiente de fricción se ajusta mediante la adición de aditivos.
Rugosidad superficial de películas plásticas
La rugosidad de la superficie es una evaluación integral de las características geométricas microscópicas de pequeños picos y valles en la superficie de la película. Una rugosidad superficial adecuada beneficia la impresión con tinta, la laminación y el recubrimiento de aluminio al vacío. Una rugosidad excesiva puede impedir que la tinta, los adhesivos o las moléculas de aluminio llenen los huecos de la superficie, lo que provoca una reducción de la adhesión y una posible delaminación durante la impresión.
Generalmente, las superficies de las películas plásticas son lisas, lo que provoca adherencia durante el bobinado y dificultades al desenrollarlo. Las superficies lisas de la película también son desventajosas para la impresión con tinta, la laminación y el recubrimiento de aluminio al vacío, ya que reducen significativamente la adhesión entre la tinta, los adhesivos y la superficie de la película. Para introducir un cierto nivel de rugosidad en la superficie de la película (aparte del tratamiento corona), se incorporan aditivos antiadhesivos durante la formación de la película. El control de la rugosidad de la superficie es crucial para la producción fluida y el uso posterior de las películas.
Resbaladiza de las películas plásticas
La resbaladizaidad depende principalmente del tipo y la cantidad de aditivos, así como del tratamiento corona. Además, el entorno de uso de la película, las condiciones de procesamiento del cliente posterior y el entorno de producción pueden afectar la resbaladiza. Controlar la resbaladiza en el proceso de producción de la película es esencial para proporcionar una resbaladiza adecuada sin causar efectos adversos en el uso posterior del cliente debido a la migración de aditivos.
Los lubricantes, también conocidos como agentes deslizantes, se clasifican en lubricación interna y externa. Cuando se procesan películas de CPP (IPP) y CPE (IPE), normalmente se agregan agentes deslizantes de tipo amida a la capa de termosellado, mientras que el procesamiento de películas de BOPP implica agregar agentes deslizantes a la capa central. Estos agentes migran a la superficie de la película ("migración externa"), formando una superficie aceitosa que mejora las propiedades de la superficie, reduce el coeficiente de fricción y mejora la resbaladiza. La cantidad agregada depende del espesor de la película y del coeficiente de fricción deseado especificado por el cliente. Los agentes deslizantes de tipo amida generalmente son innecesarios en el procesamiento de películas BOPET y BOPA.





